Ensenada _ La delincuencia en todas sus manifestaciones se ha convertido en el azote de la ciudadanía y desnuda la incapacidad de unas autoridades de los tres niveles de gobierno que se han visto muy tolerantes, indolentes en resolver este problema que los ha puesto a prueba.
Ya no es solo el problema del enfrentamiento entre los diversos grupos por lograr mayor territorio. No, los malvivientes se van directamente contra todo aquello que se mueve, vaya ni los consultorios médicos se encuentran a salvo.
El conocido médico José Luis Arce, quien atiende a sus pacientes en una clínica de la calle Delante demandó al alcalde Armando Ayala asumir su papel y velar, como es su obligación, por la seguridad de los ensenadenses.
Esto luego de que en días pasados doctores, recepcionista y pacientes fueran asaltados a plena luz del día por rufianes que los amagaron con armas de fuego.
Pero cuando el alcalde divide su tiempo en dos partes, como funcionario de elección popular y como candidato al mismo cargo, no pueden rendir buenas cuentas a la ciudadanía, es decir la efectividad de sus obligaciones la reducen también a la mitad. Lógico es el tiempo que le dedican a sus responsabilidades.
Y ya que hablamos del Alcalde Ayala no podemos dejar de criticar y censurar la forma humillante en que insultó a sus contrincantes políticos -que no sus enemigos- y en que denostó a un grupo de incondicionales.
A los primeros los definió como perros y a los otros los denigro y los sobajo a su mínima expresión al hacerlos ladrar como fieles canes
Malo…muy malo. Soberbio y engreído Armando Ayala rebasó sus límites
Guerra sucia contra el director de la Cespe
Dicen por ahí que en época de guerra cualquier hoyo es trinchera,..bueno pues durante la cosecha de votos cualquier funcionario es tomado como una diana a la que todos los que disputan un cargo tratan de darle sin importar si su labor es buena o mala…el chiste es hacer ruido y si está rindiendo mayor será el estruendo.
Tal es el caso del director local de la Cespe, Marcelino Marquez Wong, a quien le están enderezando una guerra sucia mediática.
El ingeniero Marquez es de los funcionarios que no espera en su oficina a ver quien llega con problemas para resolverlos. No, él acude a donde los dilemas se gestan. Interactúa con los afectados y les resuelve de inmediato a satisfacción, no por nada logró un reconocimiento internacional como organismo operador certificado y por su esfuerzo y dedicación a la empresa.
A diferencia de muchos otros funcionarios que utilizan sus dependencias y cargos para inmiscuirse de alguna forma en las campañas políticas, Marcelino Marquez se dedica a atender sus responsabilidades.
